De hecho, vuelvo a leer la frase anterior y me doy cuenta de que esto es muuuuuy raro.
Pero es que, como formador en esto de las TIC 2.0, no os podéis imaginar la ilusión que me ha hecho el comentario que Sara Sepúlveda (deduzco que tiene 4 añitos) nos ha dejado.
Unas pocas líneas, escritas en mayúsculas y sin espacios entre palabras, han servido para sacudir mi concepto de blog.
Siempre he abogado por el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, como una herramienta de comunicación entre toda la comunidad educativa. Por eso me gusta hacer hincapié en mis cursos y mis proyectos sobre la C de las TIC.
Propongo actividades orientadas al desarrollo de las Competencias Básicas, especialmente en lo referente a la producción de mensajes, ya sean orales, escritos o audiovisuales, siempre procurando hacer que el niño/a sea el protagonista del hecho comunicativo (Blog, Podcasting, Videoblogging). Pero es que Sara me ha mostrado que los más pequeños también pueden hacer valer sus armas produciendo mensajes llenos de significado por medio de la herramienta más sencilla de comunicación que tienen las TIC: los comentarios en un blog.
¿O es que alguien no ha entendido lo que ha querido decir Sara? Pues eso es lo importante. Sara quería comunicarnos algo y lo ha conseguido. Bien por Sara.
Y bien por el papá o la mamá de Sara que la ha sentado en el ordenador y no le ha quitado las ganas de comunicarse con excusas como "Vas a tener muchas faltas de ortografía" o "Vas a tardar un siglo en encontrar las teclas" ni mucho menos "A ver si te vas a cargar el ordenador..."
Sobre todo gracias por haber dejado el mensaje intacto, tal y como salió de los deditos de Sara, puesto que se entiende perfectamente y cumple su cometido.
¿Cúal ha sido el mensaje?
OLASOISARASEPULVEDADIAZMEGUSTALASEÑOLOLALAECHODEMENOBESITO
Aunque esta vez, obviamente, no es mi hija Sara quien escribe (seguro que volverá a hacerlo), me gustaría que algún día sintiera y expresara por escrito la misma gratitud que yo siento ahora.
ResponderEliminarHace pocas semanas, alguien me dio las gracias de la forma más simple, profunda e impactante a la vez (para mí) que jamás he recibido de una persona: “gracias por estar en mi vida”, me escribió.
Cuando he leído tu post me ha venido esta frase, no a la cabeza, sino al corazón. Yo soy quien te da las gracias por comunicar tu ilusión, tu emoción y también tu gratitud por algo tan simple como el comentario de Sarita.
Pero, ya puestos a emocionarnos, quiero dar, muy especialmente, las gracias a Lola: ella es la “culpable”. Es quien el día de la presentación del curso escolar llegó borrando la línea divisoria que, pienso, siempre ha delimitado el terreno del/la profesor/a y el del/la padre/madre. Es quien llegó poniendo sobre la mesa ilusión, entrega, respeto, cariño y comunicación (entre otras cosas) que algun@s tenemos el gusto y la suerte de saber apreciar a diario.
Hablas de la importancia de la comunicación, y cuando el emisor (en este caso emisora) del mensaje que l@s profes queréis hacernos llegar lo transmite mediante una comunicación afectiva y efectiva ¡qué fácil es ser receptor! Pues si no fuera por esto, probablemente, le habría quitado las ganas a mi niña de comunicarse con excusas como "Vas a tener muchas faltas de ortografía." Así que ¿quién tiene más que agradecer: profes o padres/madres? Yo no tengo la menor duda, ni en este caso de la lectoescritura ni en ningún otro! Y con “letra de niñ@ de 4 años” vuelvo a escribir GRACIAS INFINITAS.
Creo que has dado en la clave cuando hablas de borrar esa línea que no debe de existir.
ResponderEliminarPor cierto, déjame que bromee un poco.
Creo que, entre otras cosas, hemos hecho 14 o 15 vídeos, bastantes presentaciones de fotografías, enlaces a recursos, etc... Y ahora llega una cuatroañera escribiendo con mayúsculas y nos abre el corazón...
Que tierno profe .... pero asi es ¡¡¡
ResponderEliminarLos enanos estos nos dejan anonadados.
Mamá de Álvaro.
POR CIERTO PROFE COMO PODRÁS COMPROBAR NO ME DEJA COMENTAR CON MI CUENTA.